Digresión
Perdonen la
digresión, pero esta relación del hombre con la verdad nos ayuda a entender
cierto tipo de comportamiento: la persona que es violenta porque va guiada por
una idea fija de la que no está segura; “el que no está seguro de lo que no
puede estarlo”, que es una definición del “liberal”; el “fanático”, que está
seguro de muchas cosas, suple con violencia desatada la evidencia que le falta
y está dispuesto a borrar con sangre las interrogantes que le hacen sus dudas,
a ahogar con ella la voz que le dice que vive en lo falso, que todo eso es
simple inautenticidad. La principal ocupación del fanático es mentirse. Ni el
hombre sinceramente instalado en sus creencias ni el intelectual puede ser fanático,
el primero porque esta de verdad seguro y sereno; el segundo porque sabe que
toda idea es cuestionable, y aún siendo verdadera no la confunde con la realidad.
El fanatismo se queda para los que blanden creencias en las que no están o los
que manejan desde fuera ideas que no son suyas. José Ignacio Cabrujas
Comentarios
Publicar un comentario